Ante las tormentas registradas en la región es de suma importancia que la población sepa cómo prepararse ante posibles contingencias y, sobre todo, aprender a gestionar las emociones y adoptar conductas civilizadas en el tránsito vehicular.
Lo anterior lo destacó el Mtro. Antonio Jiménez Luna, director del Centro Universitario del Pacífico (UNIPAC), quien indicó que las emergencias por lluvia provocan estrés en la ciudadanía, pero que es necesario ser conscientes que se trata de una situación temporal.
“Es importante aprender a gestionar los recursos y emociones, y de manera anticipada el considerar hábitos que lleven a escenarios urbanos donde la disposición correcta de los residuos y basura sea una responsabilidad compartida”, apuntó.
El directivo comentó que se debe tener presente lo complicada que es la orografía de Tijuana, por tanto, se requiere de demostrar habilidades de manejo y respeto a las normas de tránsito, tanto por seguridad propia como de las demás personas.
“Hay que anticiparse a los embotellamientos, deslaves, escurrimientos o derrumbes en algunas zonas, mientras que quienes son peatones deben tener cuidado y no cruzar calles inundadas sin antes validar el peligro”, expresó.
El Mtro. Antonio Jiménez exhortó en forma particular a la comunidad estudiantil a traer consigo un par extra de medias, calcetines o zapatos por si se sufre de algún percance en el trayecto y, en la medida de lo posible, mantener comunicación con sus familiares o personas cercanas sobre la ubicación en los trayectos.
“Si presentan síntomas de enfermedades típicas de la temporada, usar cubrebocas y consultar a un especialista, de ser necesario. Es importante mencionar que toda situación de emergencia o atípica a nuestra cotidianidad conlleva a crisis emocionales que se ven reflejadas en nuestras conductas”, señaló.
Por otro lado, cuando es imprescindible quedarse en casa o permanecer mucho tiempo en un espacio para resguardarse, dijo, el celular o la televisión no son las la únicas alternativas, pues se pueden practicar actividades como dibujar, escribir, leer un libro, hacer ejercicio, compartir con la familia mediante juegos de mesa, entre otras.
“También se pueden aprender nuevos recursos y nuevas formas de gestionar las emergencias; hay que anticiparse porque las lluvias seguirán por un breve tiempo y nos visitarán el siguiente año”, finalizó.