* Cada vez más, los adultos jóvenes están retrasando el momento de casarse, ya que lo ven como una piedra angular que viene después de conseguir objetivos propios de vida, como los profesionales
SWAGGER 11 DE JUNIO DE 2014 (VANGUARDIA.COM.MX).- Llega un momento en la vida de todo veinteañero donde empieza a ver que todos sus amigos y conocidos están casándose o comprometiéndose. Por un lado estás feliz por ellos y les deseas lo mejor, pero por otro empiezas a sentir que algo anda mal con tu vida amorosa.
En realidad, no deberías pensar lo anterior. Actualmente hay más personas en esta situación que nunca. Un estudio de National Marriage Project descubrió que cada vez más, los adultos jóvenes están retrasando el momento de casarse, ya que lo ven como una piedra angular que viene después de conseguir objetivos propios de vida, como los profesionales.
A continuación te mostramos cinco razones válidas —vistas en The Huffington Post— que muestran que está bien no casarse nunca.
1. La mayoría de las personas ya no tienen prisa por casarse
Según las estadísticas de Pew, allá por la década de 1980, la edad media para contraer matrimonio (en Estados Unidos) era de 25 para los hombres y 22 para las mujeres. Pero en 2011, el promedio de edad del primer matrimonio fue de 29 para los hombres y 27 para las mujeres. El reporte dice que el cambio se debe al hecho de que hay personas que no sienten la necesidad de estar casados para ser padres y por la “competencia de otras formas de vida” como vivir solo o vivir con sus parejas. Por lo tanto, no hay necesidad de hacer hincapié en no casarse, ya que todo el mundo se está quedando solo también.
2. De hecho, muchas personas sienten que no hay muchas ventajas al estar casado
Una encuesta de Pew en 2010 indica que, por todas partes, las personas solteras no sienten que la gente casada tenga tantas ??ventajas en términos como el “cumplimiento de la vida sexual, estar económicamente estable o la búsqueda de la felicidad”. Y el 24% de los que sienten que el matrimonio hace una diferencia positiva en la vida dicen que cuando se trata de trabajo, estar unido a alguien puede dificultar el éxito en su carrera.
3. Para los hombres, estar casado podría estar conectado con el sobrepeso
Un estudio reciente publicado en Families, Systems & Health muestra que los hombres son más propensos a ser los más “pesados” ??en un matrimonio. Después de monitorear los hábitos de alimentación, actividad física y el peso de 2,300 jóvenes en el Medio Oeste de Estados Unidos, el 25% de los hombres casados ??tenían más probabilidades de ser más obesos que los varones sin pareja o en una relación comprometida. Y de acuerdo con el estudio, alrededor del 60% de los hombres casados ??tenían exceso de peso en comparación con alrededor del 40% de las mujeres casadas.
4. Casarse puede poner tus amistades en riesgo
Aunque esto se aplica probablemente a personas que tienen en su mayoría amigos solteros, muchas personas se sienten extrañas en sus amistades después de casarse. En un artículo de New York Magazine, Amy Sohn destaca las maneras en que algunas parejas pierden el interés en su vida social cuando se casan:
“Desde que me casé, mis amigos me han tratado como si hubiera contraído una enfermedad contagiosa. Dejaron de invitarme a cenas y luego empecé a darme cuenta que no me invitaban a fiestas. Por supuesto, he cambiado un poco, también. Sin un incentivo para “cazar” a un hombre, estaba menos interesada en ir a fiestas y bares”.
La planificador de bodas Sandy Malone opinó en un blog del Huffington Post que la gente tiende a perder por lo menos un amigo cercano cuando se casa, pensando que un marido o una esposa llenará ese papel. Cuando alguien pasa cada hora del día con su cónyuge, eso puede llevar a descuidar a las otras personas en su vida. Lo que nos lleva al siguiente punto…
5. El matrimonio puede dar lugar a la costumbre riesgosa de depender de una sola persona
Bella DePaulo, psicóloga social y autora de “Singled Out: How Singles are Stereotyped, Stigmatized, and Ignored, and Still Live Happily Ever After”, dijo a The Huffington Post que muchas parejas casadas cometen el error de convertir a su esposo en un “socio para el sexo y todo lo demás”. Acuden a ellos para todas las fuentes de satisfacción, así como “el compañerismo, la intimidad, el cuidado, la amistad, el reparto de tareas y las finanzas del hogar y la familia, y casi todo lo demás”. Esto crea una poco realista “fantasía cultural” que se traduce en decepción e infelicidad.
Por Swagger