ENSENADA BC 28 DE JULIO DE 2016.- Ante la discrepante información relacionada con el problema del suministro de agua para la ciudad de Ensenada, es importante que los diferentes actores involucrados se pongan de acuerdo para unificar criterios y establecer cuál es la realidad y evitar confusión sobre el tema.
Jorge Eduardo Cortés Ríos, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación de Ensenada (Canacintra), señaló que hay discrepancia entre las cifras de las necesidades de agua que maneja la Comisión Estatal de Servicios Públicos (Cespe), que ronda los 850 litros por segundo en verano y 700 en invierno, sin embargo esas cifras no cuadran con la realidad.
De acuerdo con estimaciones del sector empresarial se requiere una disponibilidad de alrededor de 1,250 A 1,500 litros por segundo solamente para solventar las necesidades actuales de abasto, por lo que no queda recurso para dar viabilidad al crecimiento que cada año se incrementa, consideró.
Precisó que aun sumando a la existencia de líquido de los pozos de Maneadero, Valle de Guadalupe y Ensenada, el suministro proveniente del “Flujo Inverso”, la ciudad sigue con un enorme déficit a juzgar por las constantes quejas de la población de diferentes colonias y fraccionamientos.
El dirigente empresarial reconoció el avance en la construcción de la planta desalinizadora, que si las cosas siguen como van, producirá 250 litros por segundo a partir del primer trimestre de 2017.
Con ello, en el mejor de los casos, la disponibilidad apenas podría llegar a 1000 litros por segundo, apuntó, por lo que no sería la solución a mediano plazo aun cuando se elevara a su total capacidad de 500 litros.
Por otra parte no hay una definición oficial con respecto de la construcción o no del Acueducto Tanamá-Valle de Guadalupe ante la puesta en operación del “Flujo Inverso” que en los hechos ya trae a Ensenada parte del agua que le corresponde de su cuota del Río Colorado.
Jorge Eduardo Cortés Ríos mostró su preocupación con relación al desarrollo de actividades económicas que necesariamente se tienen que dar como el reinicio del desarrollo de centro habitacionales ante la demanda de vivienda, porque sin agua no habrá factibilidad.
Cada año egresan alrededor de 1,800 nuevos profesionistas de la UABC y otra cantidad similar de las diferentes universidades públicas y privadas del municipio con lo que la demanda puede llegar a 3,600 a 4,000 nuevos puestos de trabajo, sin que esto sea posible por la falta oportunidades al no haber nuevas empresas que los generen, dijo.
Sin agua, no hay desarrollo ni la oportunidad de planear al futuro económico del municipio, señaló el presidente de Canacintra.
Ante tal situación urgió a todos los involucrados en buscar solución al abasto del agua, a reunirse y unificar criterios en cuanto a las necesidades del líquido, infraestructura y recursos para resolver el problema.