Por Crisstian Villicaña
Una mujer de 55 años intentó traficar alrededor de 25 kilos de pepino de mar desde Mexicali a Calexico a través del puerto de entrada por automóvil.
El contrabando de este tipo de animal es muy penado, ya que su función como limpiadores del océano es fundamental para mantener un ecosistema sano, sin embargo, su alto costo lo hace muy atractivo para el crimen organizado, su valor por kilo en países de Asia ronda los 3 mil dólares.
Fue en la mañana del 21 de agosto cuando agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) encontraron a una mujer que conducía un modelo sedán 2014.
Durante la inspección un oficial de CBP abrió el maletero del vehículo y descubrió lo que parecían pepinos de mar secos y envió a la conductora y el vehículo para una inspección más detallada.
En el área de inspección, un especialista en agricultura de CBP confirmó que los artículos eran pepinos de mar secos y en la cajuela del vehículo se encontraron los 25 kilos del producto.
“Esta interceptación resalta la dedicación y vigilancia de nuestros oficiales de CBP y de agricultura especialistas en proteger nuestras fronteras y recursos naturales”, afirmó Roque Caza, director de Área Portuaria de Calexico.
“Intentos de contrabando como este representan una amenaza no sólo para la seguridad de nuestro país sino también para al equilibrio medioambiental”, añadió el funcionario estadounidense.
Los pepinos de mar están sujetos a regulaciones estrictas para evitar la sobreexplotación y garantizar la sostenibilidad de los ecosistemas marinos.
El contrabando de tales cantidades no sólo viola estas regulaciones pero también interrumpe los esfuerzos de conversación ambiental.