Tijuana, Baja California, 06 de agosto de 2022.- Fueron 330 las parejas que decidieron unirse en matrimonio durante la ceremonia denominada “Para Siempre Frente al mar”, donde además de contrayentes mexicanos, decidieron formalizar su relación en Tijuana, parejas de extranjeros.
La segunda ceremonia de matrimonios colectivos que el XXIV Ayuntamiento realiza este 2022, y que tuvo como escenario los arcos del malecón de Playas de Tijuana, estuvo encabezada por la Alcaldesa Montserrat Caballero Ramírez, quien ante las más de 300 parejas inscritas, que cumplieron con los trámites requeridos, dijo “hoy juntos van a comenzar una nueva vida y un nuevo proyecto, así como el amor y la experiencia en el matrimonio donde se siembra una semilla llamada familia, es un placer para mí acompañarlos, ser invitada y casarme con ustedes, con sus familias, porque hoy en cada uno de sus hogares estará este gobierno para apoyarlos y cuidarlos”.
De las 330 parejas, cuatro forman parte de la comunidad LGBT+, además de que algunos de los recién casados son de origen extranjero, tal es el caso de Alex Kidd y Victoria Chekhova, él de origen norteamericano y ella de origen ruso, así como algunos otros procedentes de países como Venezuela, Guatemala, y Honduras que decidieron unir sus vidas en Tijuana.
La oficial 01 del Registro Civil, licenciada Georgina Bátiz, destacó que es a través de esta noble institución que se otorga identidad jurídica a los ciudadanos, ocupándose de suscribir los hechos y actos jurídicos relativos al estatus civil en las diferentes etapas de las personas como el nacimiento, defunción y matrimonio.
“Es un honor para mí estar aquí con ustedes, en este escenario inigualable donde se puede sentir la fuerza del mar que es tan grande como el amor que los trajo en este momento a unirse en matrimonio; como pareja ustedes asumen la responsabilidad de cuidarse, enfrentar las situaciones que se les presenten, así como de ser claros y respetar su individualidad y de formar una familia ejemplar para la sociedad”, manifestó Bátiz Santillana.
Las parejas no sólo formalizaron su unión para dar estabilidad a su relación, sino que aceptaron los derechos y las obligaciones que por ley emanan.