Octavio Fabela Ballinas
Tijuana.- Aunque no del todo, la solicitud formal para que niños y mujeres embarazadas que forman parte de la Caravana Migrante dejen de pernoctar en el campamento que han instalado desde el domingo en la Garita de El Chaparral no recibió una respuesta por parte de los líderes que se reunieron con el Consejo Estatal de Atención al Migrante.
En las instalaciones del Instituto Nacional de Migración, los dirigentes de la Caravana entre los que había activistas y migrantes aseguraron que “en peores condiciones hemos estado” como una forma de negarse a dejar el lugar donde unas 200 personas entre niños, mujeres y adultos pasan los días en espera de ser atendidos por el Servicio de Inmigración de Estados Unidos.
Directivos de albergues para migrantes reconocieron que solo el grupo de miembros de la comunidad Lésbico, Gay Transgénero que también forma parte de la caravana han aceptado recibir hospedaje en sus instalaciones sin embargo destacaron que las bajas temperaturas que se han sentido en las últimas noches hace preocupar por la salud de los más pequeños.
Uno de los líderes de la caravana que viaja con su familias, aceptó que hablaría con el resto de los viajeros para que acudan a un albergue, condicionando que no van a levantar el campamento que han instalado hasta obtener un acuerdo satisfactorio con el gobierno de Estados Unidos para que puedan ser atendidos.
Mediante un documento que constó de tres puntos el presidente del Consejo Estatal de Atención al Migrante, Rodolfo Olímpo Bojórquez planteó que además de refugiarse en los albergues, deben definir una fecha de término de la que llamaron “protesta”. A lo que los migrantes respondieron que no levantarán el campamento.