CDMDX.- Un fuerte terremoto de 7.1 en la escala de Richter sacudió hoy el centro de México dejando al menos 137 muertos en los estados de Morelos, Puebla, México y la capital mexicana, que quedó sumida en el caos por el colapso de una veintena de edificios.
El temblor generó múltiples escenas de pánico y ocurrió a las 13.14 hora local, dos horas después de efectuarse un simulacro conmemorativo del poderoso terremoto de 1985 de magnitud 8.1.
Esta vez el sismo en la capital se sintió con más fuerza que el registrado el pasado 7 de septiembre, de magnitud de 8,2 en la escala de Richter, dado que el epicentro fue más cercano.
El sismo del 7 de septiembre, el más poderoso desde 1932 en el país, dejó 98 muertos en el sur del país; 78 en Oaxaca, 16 en Chiapas y 4 en Tabasco.
El mayor número de muertos del terremoto de hoy se produjo en el estado de Morelos, 54, en Puebla 26, 8 en el estado de México y 30 en la capital, aunque se teme que aumenten los fallecidos dado que hay muchas personas atrapadas en los edificios derrumbados.
Los servicios de rescate y de emergencia trabajan activamente en la búsqueda de personas atrapadas en edificios derrumbados, de acuerdo con los primeros informes de las autoridades.
Miles de personas se han sumado de manera espontánea para apoyar a los servicios de emergencia en la limpieza de escombros de los edificios en busca de señales de personas que pudieron haber quedado atrapadas.
Las escenas de solidaridad se repiten en la capital con miles de personas en las calles que no ocultan su emoción y miedo a que se repitan nuevos temblores.
El suministro de electricidad en la capital se cortó y el Metro dejó de prestar servicios los primeros 30 minutos después del terremoto.
Los servicios de comunicación telefónica se interrumpieron por el sismo y al momento se mantienen saturados por la alta demanda de llamadas. Las autoridades han pedido a la población que solo los use para emergencia y para localizar a sus familiares y que eviten enviar fotos y vídeos.
Miles de personas caminan por las calles de la capital mexicana para intentar volver a sus casas, con la mayoría de avenidas atascadas, principalmente por los cortes en las zonas de derrumbes, como las colonias Condesa, Del Valle, Narvarte, Centro, Coyoacán y Xochimilco.
Las clases en las escuelas de la capital mexicana, y los estados de Morelos, Puebla y México, han quedado suspendidas hasta nuevo aviso.
La alerta sísmica sonó con tiempo y permitió que muchas personas lograran salir de los edificios para resguardarse en las calles.
Protección Civil de Morelos dio cuenta de “daños importantes” en la infraestructura de vivienda, edificios públicos e históricos del estado; y confirmaron el colapso de un puente en la autopista que va de México a Acapulco, y daños a dos plantas de tratamiento de agua.
Las autoridades del estado de Puebla han reportado hasta el momento la muerte de 26 personas ocurrida en una escuela, además de daños materiales en varios edificios tanto en la capital del estado como en la ciudad de Cholula.
El gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, informó de al menos ocho víctimas mortales y 22 heridos a causa del terremoto.
El Aeropuerto Internacional de Ciudad de México ha suspendido sus operaciones hasta que se concluya con la revisión de toda la infraestructura, lo que provocó que decenas de vuelos hayan sido desviados a terminales cercanas como la de Toluca y la de Querétaro.
El director del Instituto Mexicano del Seguro Social (Imss), Mikel Arriola, anunció la apertura de los servicios de emergencia para toda la población y hospitales privados atienden los castos de urgencia sin costo.
El sismo tuvo su epicentro en el límite entre los estados de Puebla y Morelos, a 12 kilómetros al sureste de Axochiapan, Morelos, y a 120 kilómetros de la Ciudad de México, y la profundidad fue de 57 kilómetros, precisó el Servicio Sismológico Nacional en un comunicado.