Adrián Anzar, el nuevo “verdugo y cobrador de cuotas” de todos los grandes traficantes fayuqueros
En los recintos fiscales de la Aduana de Tijuana se está produciendo un fenómeno alarmante: la misteriosa desaparición de vehículos y su posterior desmantelamiento por parte de presuntos delincuentes. A pesar de que estos recintos están resguardados por personal militar y elementos de la Guardia Nacional, hasta ahora no se ha hecho nada para resolver esta situación. Estas unidades pertenecen a propietarios a quienes se les confiscaron por irregularidades, pero quienes ahora están exigiendo su devolución a través de demandas legales. Si la autoridad competente resuelve devolverlos, el gobierno tendrá que compensar completamente a los afectados o enfrentar demandas penales.
Ante la ineptitud del personal militar encargado de la gestión de la Aduana, la Dirección General de esta dependencia ha tomado la decisión de designar a un nuevo jefe de Plataforma, quien se espera ejerza la función de subadministrador. El nombre de esta persona es Adrián Anzar, cuya capacidad para desempeñar el cargo se desconoce. Sin embargo, se rumorea que será el responsable de llevar a cabo las tareas consideradas “sucias” en la Aduana, las cuales los militares, debido a su formación, no pueden realizar. Estas labores supuestamente implicarán hacer todo tipo de acuerdos con los grandes importadores para asegurar que sigan pagando sus respectivas cuotas por el tráfico ilegal de mercancías y evitando los aranceles establecidos en el libro azul, lo cual les permite ahorrarse grandes cantidades de dinero.
La llegada de los militares al control de las Aduanas se esperaba que acabara o al menos redujera la corrupción, pero todo indica que la situación está empeorando o permaneciendo igual. El cobro de cuotas y los sobornos continuarán, e incluso podrían volverse más descarados. Con la llegada de Adrián Anzar, su “trabajo” consistirá en convertir la Aduana de Tijuana en una posible “caja chica” para el próximo candidato de MORENA a la presidencia de la república. Lo que sí es cierto es que el personal del Servicio de Administración Tributaria (SAT) en Baja California tendrá mucho trabajo para asegurarse de que todos estos evasores que pagan cuotas por su contrabando equiparado cumplan con sus impuestos correspondientes. No es desconocido que este personal ha estado cumpliendo su función al “poner en cintura” a tantos evasores fiscales de cuello blanco en el estado, quienes creen que debido a sus conexiones políticas o con funcionarios de la administración pueden hacer lo que les plazca.
El próximo lunes, Adrián Anzar será presentado al personal de la Aduana en Tijuana. Mientras tanto, se sabe que ya ha visitado las oficinas de Mexicali y Ensenada junto con el personal de la Dirección General de México. Esto deja en claro que el administrador enviado por las fuerzas castrenses no será más que la “cara bonita” de la dependencia, mientras que el verdugo y recaudador de cuotas será este personaje. Se desconoce a quién tiene como padrino, pero esteremos muy vigilantes de su actuación así como darles a conocer todo tipo de “tranzas y abuso” que cometa, pero sobre todo “los arreglos que haga con los principales fayuqueros del país, incluidos los de Guadalajara y hasta de Tepito”, con quienes presumiblemente ya se han arreglado por indicaciones de la misma Dirección General de Aduanas.