Octavio Fabela Ballinas
Tijuana.- A doce días de que inicie formalmente el proceso electoral de Baja California, la XXIII Legislatura se mantiene sin nombrar a quien será el Fiscal Electoral, situación que resulta extraña pues los actuales diputados han dado muestras de tener la capacidad de proponer, cabildear y aprobar reformas y leyes en menos de 24 horas asegura Miguel Ángel Ordaz, presidente del Consejo Nacional de Vigilancia de la Coordinadora Nacional de Abogados de México.
“El proceso electoral ya está en marcha prácticamente y nos estamos arriesgando a que cuando se designe, si es que lo hacen tardíamente, se le pueda tachar inclusive de falta de legitimidad, se tiene que llevar a cabo esta designación de manera extraordinaria e inmediata, no podemos seguir esperando a que el sistema jurídico se vulnere”, refirió.
Apenas el pasado ocho de noviembre el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez, envió al Congreso del Estado una terna de tres candidatos para ocupar el cargo de Fiscal Especializado para la Atención de Delitos Electorales, entre los que están Francisco Javier Tenorio Andújar, quien es director de consultoría legislativa del Congreso del Estado, la abogada María Adolfina Escobar López, y el litigante especialista en temas electorales, Carlos Barboza Castillo.
La demora para elegir al fiscal en delitos electorales, así como al fiscal anticorrupción, no se explica, añadió Ordaz.
“Ignoramos a que se deba esa tardanza en estos dos rubros fundamentales para la sociedad bajacaliforniana. Ya nos han dado cuenta de cuando se quiere se puede, habido eventos en los que en un poquito más de 24 horas han sacado acuerdos, han cabildeado e inclusive se ha publicado alguna legislación”, haciendo referencia a los diputados del congreso.
Al final, enfatizó la importancia de que la persona que ocupe el cargo de fiscal en delitos electorales se mantenga firme en su labor con la ciudadanía pues “desde una perspectiva totalmente objetiva, totalmente imparcial, que no se preste ni a componendas ni arreglos como coloquialmente se dice, por debajo de la mesa”, concluyó.