TIJUANA BC 9 DE JUNIO DE 2017.- El manto de inseguridad y violencia que cubre a esta ciudad ha alcanzado un nuevo nivel, que nunca se llegó a pensar que sucedería, pues la noche de ayer un sacerdote identificado como Toño Zambrano, fue atacado por un delincuente que pretendía sustraer objetos de valor de la parroquia San Pedro y San Pablo, localizada en el Florido Primera Sección, al verse sorprendido por el párroco, el ladrón intentó huir, sin embargo, al no ver una salida este se abalanzó contra el cuidador, a quien le encajo un desarmador en la cabeza.
El informe hasta el momento es que el padre Toño se encontraba en su casa, la cual esta situada justo a lado de parroquia, cuando escuchó el ladrido de los perros, al salir observó a un sujeto, de aspecto antisocial, que se mantenía agazapado. Fue en este momento que el guía espiritual, al ubicarlo le dijo que se marchara, sin embargo, este no hizo caso y al contrario de irse se fue atacar al padre con un cuchillo, pero este no le hizo daño, entonces utilizó un desarmador, el cual se lo encajo en al cabeza, justo arriba de la oreja izquierda.
Luego de herir al sacristán, el hampón huye del lugar, mientras que vecinos alertaron a las autoridades, que llegaron de inmediato para darle los primeros auxilios, pero al verse gravemente herido, estos tuvieron que trasladarlo a la clínica de Issstecali, en donde se encuentra estable.
El arzobispo Francisco Moreno Barrón, visitó esa misma noche al sacerdote herido en la clínica, en donde sostuvieron una plática corta pues iba a entrar a cirugía para retirarle el desarmador del cráneo.
Cabe resaltar, según un medio local, el encargado en esta ciudad de la Arquidiócesis pidió a las autoridades más seguridad para ellos, pues este hecho es considerado como un distanciamiento o falta de estrategia policial, ya que con anterioridad se había denunciado que había robos en las iglesias.