* La Fundación Rebeca Lan y la CANIRAC llevaron a cabo este curso en el sector femenil del centro penitenciario de Tijuana con participación de 20 reclusas
TIJUANA.- Como parte de las actividades de inicio de año, 20 mujeres privadas de la libertad del centro penitenciario de Tijuana participaron satisfactoriamente en el taller de elaboración de rosca de reyes.
La Fundación Rebeca Lan y la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC) llevaron a cabo esta actividad con apoyo de Distribuidora La Canasta, que brindó a tres de sus chefs para impartir el curso en el que las mujeres privadas de la libertad amasaron, prepararon y cocinaron la rosca que finalmente se entregó al día siguiente en un evento protocolario de culminación del taller.
En dicho evento, el titular de la Comisión Estatal del Sistema Penitenciario (CESISPE), José Gabriel Gálvez Beltrán, hizo entrega de las constancias a las damas participantes, felicitándolas por sus constantes deseos de adquirir nuevos aprendizajes e invitándolas a seguir siendo ese ejemplo para el resto de sus compañeras.
Presentes en el acto estuvieron también Rashel Cohen, Presidenta de la fundación Rebeca Lan, así como Dulce Arista Cortez, Directora de CANIRAC Tijuana Genaro de la Torre Quintanar, Director Empresarial de Distribuidora La Canasta.
Por parte de la CESISPE acompañaron al Comisionado, Luis Alberto Machado Domínguez, Director de Centros Penitenciarios y Centros de Internamiento para Adolescentes de Baja California, Marcos Álvaro Elver Silva Preciado, Subdirector General Normativo y José Rodrigo Berber Macías, Director del centro penitenciario de Tijuana.
Una vez entregadas las constancias de reconocimiento, la recién nacida orquesta musical del centro, compuesta por 30 elementos de la población interna femenil, realizó una presentación con algunas melodías, para finalmente, concluir el evento con la partida de rosca, en la cual cabe señalar tanto el Comisionado Gabriel Gálvez y el Director del centro, Rodrigo Berber, se sacaron el “monito”, prometiendo así, la clásica “tamaliza” para el día de la Candelaria.