Mexicali, B. C. miércoles 18 de diciembre de 2019.- El presidente municipal de Tijuana, Arturo González Cruz, presentó un proyecto de Ley de Ingresos por un monto de ocho mil cien millones de pesos para ejercer en 2020, en el que no se propone ni incremento al predial, ni nuevos impuestos.
Lo anterior fue planteado por el alcalde tijuanense ante la Comisión de Hacienda y Presupuesto (CHP) que preside la diputada Rosina del Villar Casas, al asistir en el marco de la serie de comparecencias que sostiene este cuerpo legislativo para analizar las leyes de ingresos y de presupuestos de egresos de los tres poderes y de los cinco ayuntamientos del Estado.
La sesión se verifico en el seno de la CHP, con la participación de los legisladores Eva Griselda Rodríguez, secretaria, así como de los integrantes de la misma: diputadas Monserrat Caballero Ramírez y Miriam Elizabeth Cano Núñez, al igual que los diputados Julio César Vásquez Castillo y Juan Manuel Molina García.
También participaron las diputadas Araceli Geraldo Núñez, María Luisa Villalobos Ávila, Carmen Leticia Hernández Carmona. y Julia Andrea González Quiroz, así como los diputados Luis Moreno Hernández, Rodrigo Aníbal Otañez Licona, Fausto Gallardo García y Eli Topete Robles, además de la diputada Rosina y el presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, diputado Víctor Manuel Morán Hernández.
El primer edil tijuanense aseguró que en los primeros 100 días que lleva al frente de la administración municipal, ha cumplido más del 80 por ciento de lo planeado y sostuvo que pondrá en marcha una estrategia de cobranza a deudores morosos con la finalidad de evitar el aumento de impuestos, especialmente el predial, en tanto que el incremento de lo recabado será destinado a los renglones de seguridad y justicia social.
Dijo que, en cuanto a servicios, se incrementará sólo el porcentaje inflacionario, que hasta el momento está calculado en 3.2 por ciento.
Reveló además que se pondrá en marcha un programa de estímulos fiscales para empresas de nueva creación, el cual consiste en reducir impuestos a cambio de la creación de fuentes de empleo.
En cuanto a la deuda externa, reveló que asciende a dos mil seiscientos cincuenta millones de pesos, con un costo anual de 20 a 25 millones de pesos, por lo que se buscará reestructura el financiamiento, en virtud de que existen condiciones crediticias en las que se obtendría un ahorro sustancial.