Rosarito- Son ya tres semanas que personal de verificación de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) procedió a cancelar o inmovilizar cuatro bombas expendedoras de gasolina. Ésto en un operativo efectuado en la estación de Petro Seven, ubicada sobre el Bulevar Benito Juárez y Puente Machado en Rosarito. Tal medida, informó Aldair Hinojosa, Gerente de Dicha estación, no sólo bloqueó a la empresa en una situación embarazosa que afecta a la imagen de esta empresa, sino que también dejó sin el sustento o salario a por lo menos 12 empleados y sus respectivas familias. El gerente de Dicha estación se mostró molesto y desesperado al aclarar que fueron sancionados no por cobrar litros en forma indebida, sino a una serie de ajustes técnicos en proceso como parte de la renovación u conversión de la nueva imagen corporativa de esa firma gasolinera. Que quede claro que la sanción, la cual es muy elevada, se origina por un supuesto desajuste, posibles fallas técnicas que pudieran generar peligrosas fuga de combustible. Todo por la remodelación de esta Subestación, reiteró. Otra de las sanciones, agregó el gerente, fue incluso por haber servido 300 mililitros extras de combustible, lo cual es considerado también como una falla que ameritaba ser sancionada, a decir de la PROFECO, asentó la fuente informativa.