Redacción
Tijuana.- La atención de los migrantes asilados en el refugio temporal Benito Juárez es un asunto que requiere de la inmediata intervención de los organismos mundiales y el gobierno federal pues se corre el riesgo de que por cubrir las necesidades de la Caravana Migrante el Ayuntamiento se vea imposibilitado para prestar los servicios públicos que la población demanda.
En entrevista recordó que para atender el refugio temporal, el gobierno de la ciudad gasta poco más de medio millón de pesos al día para alimentar y brindar servicios básicos a los más de cuatro 700 mil migrantes, sin que hasta el momento alguna autoridad que es responsable de su estadía coopere con recursos económicos.
Detalló que de acuerdo a la Ley, el Ayuntamiento de Tijuana tiene la obligación de pagar los servicios públicos: seguridad pública, recolección de basura, la nómina, sueldos de los policías bomberos, entre otros, “no se tiene porque seguir gastando en un tema que es nacional, internacional, por eso solicitamos que se genere un esquema para ayudarlos a ellos”.
Respaldó la posición del alcalde, Juan Manuel Gastelum Buenrostro, quien decretó crisis humanitaria en Tijuana, ya que la población migrante está afectando las finanzas municipales “ y este es dinero de los ciudadanos que no se pueden comprometer, pues los siete mil millones de pesos del presupuesto de Tijuana se privilegia el gasto Social, seguridad pública y servicios”.
Recalcó que la responsabilidad es del Gobierno Federal, y está autoridad tiene la obligación de apoyar al Gobierno Municipal en el control de la Caravana y en la declaración de crisis humanitaria.