* Ya van 1500 asesinatos en Tijuana, en tan solo medio año
* En todo el año 2017 se registraron 1744 ejecuciones
Redacción
En tan solo medio año, y los primeros días de este mes de julio, se ha superado la cifra de 1500 asesinatos en Tijuana, siendo que en el 2017, autoridades y sociedad, asombrados, vieron la comisión de 1744 ejecuciones y las expresiones de espanto lo apuntaban como de los años más violentos de la última década.
Las autoridades ni se tibian porque se sacuden con el argumento de que la mayoría de los ejecutados son de “ajustes de cuentas” entre elementos del crimen organizado, y lo peor de todo, evaden sus responsabilidades “pasándoles la bolita” a las otras instancias, el municipio y el estado a la federación, y el gobierno federal, pese a sus gendarmerías, acusan falta de coordinación de las autoridades locales.
Mientras se discuten sus papeles y se realizan reuniones de Consejo de Seguridad que no se perciben en los hechos, en estrategias ni en resultados, la violencia sigue imparable, en Tijuana y en todo el estado.
En menos de una hora se registró en la noche del jueves 5 de julio a dos personas heridas con arma de fuego, una de las cuales quedó sin vida, en hechos distintos ocurridos en la ciudad.
El primer caso ocurrió a las 20:30 horas (8:30 de la noche), sobre la Calle Esmeralda, en la colonia El Progreso, en donde los policías municipales, siempre los primeros en llegar, localizaron a un hombre con impacto de bala en la cabeza, y fue declarado sin vida por los paramédicos de Cruz Roja que llegaron al lugar atendiendo el reporte.
El segundo hecho ocurrió a las 21:15 horas (9:15 de la noche), menos de una hora después del primer caso citado, reportándose la presencia de un hombre lesionado por arma de fuego, quien llegó por su propio medio a las instalaciones del C2 de la Policía Municipal; llegó a bordo de una camioneta pickup color gris y presentaba un impacto de bala a la altura del hombro.
El hombre, todavía sin identificar, fue trasladado a un hospital de la ciudad para que le dieran atención médica.
De acuerdo con testigos de los hechos, el ataque ocurrió precisamente una cuadra antes de llegar a las instalaciones del C2 de la Policía Municipal, lo cual es una afrenta y un mensaje de impunidad de los criminales.