TIJUANA. – “Es muy doloroso ver a niñas y niños siendo separados de sus padres, cuando buscan cruzar a Estados Unidos en busca de un futuro que, como país, no hemos sabido darles. Tal situación es un fuerte llamado de atención, para que hagamos lo que se necesita con el objetivo de entregarles, a ellas, ellos y sus familias, un porvenir en México, evitando que acaben sufriendo en otro país”, señaló Ana Erika Santana González, candidata a diputada federal por el distrito 06.
Santana recordó que la política migratoria que está aplicando el gobierno estadounidense es violatoria del artículo 9 de la Convención sobre los Derechos del Niño, emitida en 1989 por la Organización de las Naciones Unidas y ratificada en 1995 por el vecino país.
“El gobierno estadounidense está violando un tratado internacional, lo sabe, pero no le importa, lo cual es absolutamente deleznable”, manifestó.
“Pero para nosotros, como mexicanos, bajacalifornianos, tijuanenses, el tema debe ir más allá del condolernos al atestiguar esta atrocidad. Debemos trabajar para que ninguna niña, ningún niño, ninguna familia, tenga la necesidad de cruzar la frontera, para poder sobrevivir, debiendo enfrentar ese horror”, aseveró.
“Aquí, en Tijuana, en el distrito 06, existen niñas y niños que no tienen que comer, que juegan al lado de un canal con aguas negras, que no tienen vivienda digna. Si ellas, ellos y sus familias no terminan cayendo en manos del crimen, seguramente terminarán intentando cruzar a Estados Unidos, vendiendo, para ello, hasta la dignidad, porque ¿a qué se quedan?”, cuestionó.
“Para miles de familias migrantes, que se asientan en Tijuana, los Estados Unidos son como un oasis en medio del largo paseo por el desierto que han vivido, porque tanto en su comunidad de origen, como aquí en la frontera, solamente han encontrado miseria y más miseria, así como gobiernos miopes, que no los ven, ni oyen”, lamentó.
“Quienes tienen mayor nivel académico y económico, también poseen mayor responsabilidad de solidarizarse con las familias migrantes. Y solidaridad no es llevarles un pavito en Navidad y olvidarse 364 días de que existen. Solidaridad es trabajar en construir leyes y mecanismos que les permitan vivir mejor todos los días de su vida. Desde la trinchera ciudadana se puede hacer. Lo único que necesitamos es voluntad para salir y hacer lo correcto”, delineó.