Octavio Fabela Ballinas
Tijuana.- Las ambigüedades y serios vacíos legales que presenta la licitación para la rehabilitación del sistema de alumbrado público en Tijuana hace suponer un proceso amañado y con dedicatoria para alguien además que no garantiza que los trabajos que se realicen sean con materiales de la calidad necesaria coinciden comerciantes y constructores eléctricos.
En el foro de la Asociación de Periodistas de Tijuana, los presidentes de la Asociación de Comerciantes Eléctricos de Tijuana, Rolando Escobedo Ortiz y de la Asociación de Constructores de Obras Eléctricas y Mecánicas de Baja California, el ingeniero Luis Alonso Gerardo Sánchez, coincidieron que la licitación no ofrece garantías a la ciudad.
Explicaron que debido a que no hay proyecto ejecutivo, los trabajos se realizarán al gusto de quien gane la concesión, y el ahorro obligado del 50 por ciento pone en riesgo de dejar una ciudad mal iluminada pues ninguno de los 23 licitantes va a comprar en Tijuana las lámparas, postes, cables, ni la tubería; nada; son libres de adquirirlos donde quieran y de la calidad que ellos elijan, en cualquier otro estado o país y eso que era un compromiso de meterlo en las bases, y no lo hicieron.
El ingeniero Alonso Gerardo Sánchez, precisó que de acuerdo a estudios y cálculos reales, estimaban costos de 600 a 700 millones de pesos, por la instalación y mantenimiento en 15 años, o a lo sumo, “no llega a mil millones de pesos; pero ellos ya hablan de 5 mil millones de pesos; empezaron con 3,700 y ahora 5 mil millones”.
Por otra parte, de 3 semanas se extendió a 7 semanas para elaborar proyecto, pero lo razonable debió ser tres meses, para tener un censo real de las condiciones en que se encuentran las 80 mil lámparas a remplazar, y determinar además qué va a pasar con el resto de las luminarias de la ciudad; advirtiendo que no se incluyó en las bases iluminar edificios públicos, monumentos, glorietas, escuelas y otras infraestructuras.
Respecto de las formas de pago, prosiguió el dirigente de los constructores eléctricos, se determinan diversas fuentes, mediante el impuesto al predial y el aplicable al alumbrado público, pero en eso último, hasta donde se sabe, la CFE no se da ni por enterada, y nunca se ha visto que la CFE regrese dinero.