Horizonte Informativo, México, 15 de Diciembre del 2016.-Con el objetivo de contribuir con el desarrollo sustentable en el sector agrícola, la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN) desarrolla procesos fermentativos para la bioconversión de biomasa vegetal en compuestos de interés industrial.
En entrevista para la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), el investigador de la UAAAN, Armando Robledo Olivo explicó que el principal integrante de la biomasa vegetal es el material lignocelulósico.
“Comprende alrededor de la mitad de la materia vegetal producida por la fotosíntesis y que representa el recurso orgánico renovable más abundante en el suelo. Principalmente se compone de tres tipos de polímeros: celulosa, hemicelulosa y lignina, que están fuertemente entrelazados y unidos químicamente por fuerzas no covalentes y por enlaces cruzados covalentes”, describió.
El especialista señaló que el proceso de bioconversión consiste en usar microorganismos o sus enzimas aisladas, con el fin de transformar la biomasa vegetal en subproductos de alto valor.
“Estos productos incluyen aditivos para la industria de alimentos, fertilizantes, comida para animales y energía renovable, utilizando procesos biotecnológicos”, apuntó.
Respecto a las ventajas que tiene la bioconversión de material lignocelulósico, el académico definió que la generación mundial de residuos lignocelulósicos produce contaminación del medio ambiente y pérdida de materiales valiosos que pueden ser bioconvertidos a varios productos de valor agregado.
Añadió que la lignina puede ser eliminada por medio de un producto químico o un pretratamiento físico que permita una bioconversión eficiente; éste también puede llevarse a cabo de forma microbiológica.
“La utilización del proceso de bioconversión de material lignocelulósico puede generar productos de valor agregado a partir de material de desecho y de una manera sustentable, con la posibilidad de producir mejores alimentos para el ser humano y el ganado, así como biocombustibles”, resaltó.
Sostuvo que actualmente el cuerpo académico de Desarrollo Integral Alimentario enfoca sus esfuerzos en la caracterización de procesos fermentativos para la bioconversión de biomasa vegetal en compuestos de interés industrial.
“En uno de los proyectos nos enfocamos principalmente en enzimas: lacasas, celulasas y xilanasas termoestables, utilizando para su producción hongos filamentosos aislados del semidesierto del estado de Coahuila y empleamos sustratos diversos, como olote de maíz, residuos de agave, residuos de planta de tomate, guishe, nopal y residuos de uva”, detalló.
Dijo que en otro proyecto se enfoca en la aplicación de hongos de la podredumbre blanca para la degradación de biomasa vegetal y su aplicación en la alimentación de rumiantes, adicionando una cantidad extra de proteína.
“Con estos proyectos se pretende encontrar enzimas degradadoras de material vegetal que permitan realizar procesos de bioconversión de manera eficiente y que sean empleadas a nivel industrial”, precisó.
Así como buscar alternativas sustentables para la disminución de la contaminación por residuos vegetales en el campo y otorgar alternativas a los productores y campesinos, con el desarrollo de tecnologías innovadoras, sustentables y que se puedan aplicar en tiempos de sequía.