* Urge atender la emergencia y realizar las acciones para garantizar el abasto a largo plazo
ENSENADA BC 7 DE FEBRERO DE 2014.- El impacto negativo por la falta de agua afecta a todo el Estado y no solo a un municipio, porque inhibe toda la cadena productiva, económica y deteriora la calidad de vida de la población, afirmó Wenceslao Martínez Santos, presidente del Consejo Técnico Estatal de los consejos coordinadores empresariales de Baja California (CTE-CCEs).
El dirigente empresarial consideró que los gobiernos federal y estatal deben agilizar las obras de interconexión para aprovechar la dotación de agua del Río Colorado que le corresponde a Ensenada, en lo que se da un margen de tiempo para que nuevas alternativas de suministro puedan concretarse.
Obras como la desaladora en Ensenada, la interconexión con el Acueducto Morelos, de almacenamiento, potabilización y el ramal del acueducto para conducir el agua de Tecate al Valle de Guadalupe, deben ser prioritarias, apuntó.
Martínez Santos lamentó que la obra no haya sido inscrita ante la Secretaría de Hacienda por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), para liberar los recursos, pero manifestó su esperanza de que la propia Conagua, el gobierno estatal con el respaldo de la iniciativa privada de la entidad, puedan conseguir esos fondos lo antes posible.
No obstante, consideró que más que dinero, se requiere voluntad política, toda vez que en los últimos años ha quedado demostrado que a pesar de que se sabía con suficiente anticipación que la falta de agua haría crisis en la Zona Costa, ningún gobierno hizo lo suficiente para resolver el problema que se veía venir, no obstante que el líquido siempre ha estado disponible.
“Hoy se tienen que hacer las obras urgentes, pero al mismo tiempo se requiere una visión de largo plazo para trabajar en otras alternativas como el reúso, aprovechamiento de avenidas, uso de tecnología de riego en la agricultura y una campaña seria y sistemática de cultura y ahorro del agua”, consideró.
De acuerdo a estudios de la disponibilidad de agua y el crecimiento de la población, aún cuando las obras se lleven a cabo, para el 2018, seguirá habiendo déficit, explicó, por lo que es necesario que hoy se tomen las medidas pertinentes para que eso no ocurra.
Martínez Santos propuso que autoridades federales, estatales y municipales, se reúnan en una mesa de trabajo con los empresarios y sectores interesados para establecer prioridades y coordinar las acciones más urgentes, ya que al parecer existen esfuerzos aislados y mucha desinformación en el tema.
El dirigente empresarial puso como ejemplo que mientras en Ensenada la población y todos los sectores productivos de la ciudad enfrentarán un tandeo por 2 años por lo menos, la gente de Conagua busca traer aguas grises de Tijuana al Valle de Guadalupe.
En Maneadero los agricultores están padeciendo por la intrusión salina en tierras de uso agrícola, mientras que 500 litros se derraman al mar desde la planta de tratamiento “El Naranjo”, y por otro lado las obras de la desaladora no inician porque se carece de todos los permisos necesarios de los tres órdenes de gobierno.
“Todos debemos ponernos de acuerdo para poder avanzar más rápido antes de que la inconformidad de la población siga creciendo y la economía se deteriore aún más en contrario a la Cruzada por el Empleo y el Crecimiento Económico, que impulsa el Gobierno del Estado con el apoyo de los sectores productivos de la entidad”, manifestó el dirigente empresarial.