Hasta 10 casos de situaciones de riesgo para niños y adolescentes se detectan al mes a través del Programa de Prevención en Baja California que lleva a cabo la Fundación Manos Unidas por Rosarito A.C. Los casos más comunes incluyen violencia familiar, falta de cuidados a menores, abuso sexual, trata de personas y consumo de sustancias tóxicas.
La presidenta de la Fundación, Lorena Meléndez Yáñez, mencionó que en los 10 años que lleva este programa, se han difundido medidas de prevención a más de 500 mil personas, en su mayoría estudiantes, en diversas instituciones educativas y grupos comunitarios.
“Gracias a la confianza que logramos con la comunidad, hemos detectado hasta 10 casos por mes. Durante las sesiones de prevención con estudiantes y la comunidad en general, siempre contamos con el apoyo de diversas autoridades, quienes dan seguimiento a los reportes, mientras que nosotros, como Fundación, brindamos el acompañamiento necesario a quienes lo requieren”, afirmó Meléndez Yáñez.
Meléndez también destacó que ha sido un esfuerzo conjunto entre la Fundación y los tres niveles de gobierno, cuyos funcionarios participan en las jornadas de prevención con la comunidad bajacaliforniana.
“Nuestro principal objetivo es que la comunidad tenga conocimiento de cómo identificar y prevenir delitos como extorsión, secuestro exprés, trata de personas, violencia familiar, delitos cibernéticos, acoso escolar y consumo de sustancias, entre otros”, añadió.
Durante la jornada de prevención realizada en el Centro de Estudios Tecnológicos del Mar 40 (CETMAR) en Playas de Rosarito, personal de la Guardia Nacional explicó a los estudiantes diversas formas de prevenir incidentes que puedan poner en riesgo tanto su integridad física como su seguridad jurídica. Los agentes compartieron experiencias y detallaron cómo denunciar la posible comisión de un delito, además les informaron sobre el uso de las líneas de emergencia 911 y 088 para una respuesta inmediata.
Por su parte, Laura Lilia Valencia Ramos, directora del plantel, señaló que el consumo de drogas, la violencia intrafamiliar y la violencia en el noviazgo son problemas comunes entre adolescentes que se detectan en los entornos educativos.
“Las pláticas sobre prevención son fundamentales para que los jóvenes identifiquen rasgos de violencia que, en ocasiones, normalizan sin darse cuenta. También fomentan la cultura de la denuncia y la importancia de evitar el consumo de drogas, problemas que enfrentan diariamente en su entorno”, apuntó.
Finalmente, Meléndez reiteró que los esfuerzos de prevención de la Fundación y las autoridades no solo permiten la detección temprana de riesgos para niños y adolescentes, sino que también fomentan una cultura de denuncia y autocuidado. Estas acciones son esenciales para reducir la normalización de la violencia y el abuso en nuestra sociedad, protegiendo a las nuevas generaciones y brindándoles herramientas para enfrentar situaciones de riesgo, asegurando su bienestar y futuro.