MEXICALI.- Apoyar en la restitución del derecho a vivir en familia de las niñas, niños y adolescentes que están bajo cuidado del Estado, es una de las tareas que DIF Baja California emprende día con día, y el personal del área de psicóloga, es de suma importancia para determinar el mejor núcleo para esas infancias.
Elsa Guadalupe López Sandoval, psicóloga que pertenece al equipo multidisciplinario que trabaja en el área de adopciones, ha visto cómo la atención de las emociones, tanto en la niñez como en los futuros padres adoptivos, prepara los corazones de los integrantes de estas nuevas familias.
En el 2016 ingresó a DIF Baja California, concretamente al área de ingreso de menores que eran canalizados por la autoridad correspondiente a la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, para posteriormente trabajar en diversas áreas que tienen relación con la atención a este sector de la población y, finalmente, ingresar al área de adopciones.
“Siempre me gustó trabajar en un área enfocada a las personas, entender su comportamiento y a mí misma, por lo que decidí estudiar psicología”, afirmó López Sandoval.
La labor que ella y un equipo de psicólogos desempeña, es fundamental para que el proceso de adopción se fortalezca, ya sea antes o después de asignado el infante, pues ayudan a los posibles adoptantes a comprender la nueva etapa que tendrán con su nuevo hijo o hija.
“Es muy gratificante acompañar a las personas que tienen el anhelo de integrar a alguien más a su familia, constatar ese corazón que tienen, ese amor a ciegas que tienen de querer a un niño que aún no conocen de cara, pero que ya en su corazón son esperados”, señaló la psicóloga de DIF estatal.
Una de las anécdotas que recuerda con mucho cariño es la historia de una niña que le tocó recibir en el área de ingreso de la Procuraduría, quien con el tiempo fue adoptada, lo que le llenó de alegría, ya que luego de 2 años desde su ingreso, hoy, una familia disfruta del amor que la niña les otorga.
Para Elsa Guadalupe, esta experiencia ha sido muy grata, pues acompañar a las personas y a las niñas, niños y adolescentes en este proceso de integración de una nueva familia, es ver culminado el gran trabajo que se realiza en la restitución de sus derechos.
“Agradezco la oportunidad de estar en DIF Baja California, es un área que llevo siempre en mi corazón, acompañar a las familias desde el proceso que van iniciando hasta su culminación. Es algo que no se paga con nada”, finalizó.