Baja California tiene grandes oportunidades para integrarse a la cadena de suministro de la industria automotriz, sobre todo ante las condiciones que ofrece el Tratado Comercial México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), y la migración a las nuevas tecnologías.
Lo anterior quedó de manifiesto durante el panel “The emerging auto value supply chain in North America”, organizado por la Rady School of Management de la Universidad de California en San Diego.
En dicho panel participaron Javier Valadez, director de operaciones de Kenworth México; Rubén López, gerente general de Toyota Motor Manufacturing; Alejandro Mendoza, presidente de Grupo Prodensa; y como moderador, Carlos Jaramillo Silva, presidente de Desarrollo Económico e Industrial de Tijuana (Deitac).
“Las áreas de oportunidad que se visualizan son el T-MEC, la migración de la tecnología hacia autos eléctricos y autónomos, así como el hecho de ver a la industria automotriz como una industria de movilidad”, apuntó Jaramillo Silva.
El líder de Deitac mencionó que gran parte de los componentes que se utilizan en esta industria se encuentran en Asia, por lo que uno de los retos es atraer a esos proveedores a la denominada mega región Cali-Baja.
Por su parte, Javier Valadez, de Kenworth México, destacó que hay una crisis de microprocesadores y componentes electrónicos a nivel mundial y, el 50% de las partes de los vehículos son electrónicas, por lo que el desarrollo de software y tecnologías son un área de oportunidad.
“Creo que el T-MEC dará la habilidad de traer ese tipo de inversiones a la región, porque puede haber el diseño aquí, pero no los microprocesadores, de manera que empresas pueden relocalizarse en esta región”, expuso.
Rubén López, de Toyota Motor Manufacturing, un reto será trabajar mano a mano con los proveedores con quienes se debe tener una estrecha comunicación, así como el aprovechar la ubicación geográfica de Baja California, su capital humano y el acceso a universidades que ofrecen carreras afines a las diferentes industrias.
“Las empresas no son solo automotrices, sino de movilidad, donde es importante la creatividad, encontrar nuevos caminos, tener flexibilidad y rápida respuesta para adaptarse a la demanda del mercado, para ser competitivos. El futuro es prometedor, debemos tener los ojos bien abiertos y escuchar lo que la demanda nos dice”, finalizó.