* Centro Cultural y de Alto Rendimiento, orgullos de Tijuana
Raúl García Salguero
Aunque no me lo creas pero la mañana de ayer martes estuve en el Centro Cultural Tijuana (Cecut), un amigo muy estimado y Felipe Pablovich del Razo, fuimos a buscar al director general de este organismo ícono de esa ciudad fronteriza y no encontramos a Pedro Ochoa Palacios, estaba fuera de la ciudad.
Personal del Cecut nos atendió con amabilidad, Felipe está organizando un evento de promoción turística binacional y la idea era ver espacios disponibles para 100 o 150 personas, y César Gonzalez, encargado de esa área amablemente nos mostró varios posibles escenarios, el asunto va sobre ruedas, pero ese no es el tema.
El topico es el Cecut, Don Pedro Ochoa apenas tiene dos años que asumió la dirección del Cecut y le antecedieron en el cargo Tere Vicencio, Virgilio Muñoz, José Luis Arroyo y Alfredo Álvarez Cárdenas.
Pasamos frente a lo que antes fueron las oficinas de Notimex que en paz descanse le toco apertura a Jesús Ramón Gil, en aquel tiempo aun no se construía el Cubo ni otras áreas como la Sala Carlos Monsiváis.
Tere, Virgilio, José Luis, Alfredo fueron clave para que desde el Cecut a través del Cecut se informara al mundo lo que acontecía en este lugar, cada quien a su estilo, hicieron mucho por esta noble institución que el centro cultural más grande del noroeste de México.
Hace unos meses tuve en suerte de hacer algunas preguntas sobre el Cecut al director Pedro Ochoa Palacios, gran amigo de Felipe Plavovich y ambos llevan una estrecha relación de amistad, se estiman mucho, por eso la atención tan personalizada que nos dieron al visitar esta instalación.
En la entrevista que le comento, Don Pedro fue claro: Mantener al Cecut como principal referente cultural de la región, una de las principales tareas de al frente de organismo
Precisó que uno de los objetivos de la presente administración es mantener al Cecut como principal referente cultural de la región, considerando a la cultura como un componente central de la política de desarrollo social y humano.
El Centro Cultural Tijuana (Cecut) del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) a 32 años del inicio de operaciones es el espacio que enorgullece a la mayoría de los tijuanenses, símbolo de la nueva y moderna fronteriza de 2.5 millones de habitantes, más de la mitad de otras partes del país que aquí encontraron una mejor manera de vivir.
Mencionó que el presupuesto anual del Cecut es de 115 millones de pesos, 93 millones de pesos de recursos fiscales de la Federación más 22 millones de ingreso propios pero también hablo del aspecto social que representa para la ciudad y compartió obre su trayectoria en este tema de promoción que domina.
De los planes y proyectos de su gestión precisó que uno de los objetivos de la presente administración es mantener al Cecut como principal referente cultural de la región, considerando a la cultura como un componente central de la política de desarrollo social y humano.
El Centro de Alto Rendimiento, otro orgullo de la ciudad
Además de sentir orgullo del Cecut, otro icono de la ciudad pero con la misma trascendencia es el Centro de Alto Rendimiento (CAR), lugar donde lucen los famosos y simbólicos Aros de los Juegos Olímpicos.
Estuve presente cuando se colocó la primera piedra de lo que es hoy este espacio orgullo de Tijuana, ciudad fronteriza.
Espero que no me fallen las fechas pero la primera piedra del CAR se colocó en agosto de 2003, el presidente municipal de Tijuana era el ex diputado federal Jesús González Reyes; el gobernador era Eugenio Elorduy Walter, el dirigente de la Comisión Nacional del Deporte, Nelson Vargas y el rector de la Universidad Autónoma de Baja California, Alejandro Mungaray Lagarda.
El titular del Comité Olímpico Mexicano, Felipe Muñoz Kapamas, actualmente diputado federal, también atestiguó la ceremonia de colocación de la primera piedra y como deportista invitada especial estuvo la rosaritense Rosy Torres, una gran raquetbolista.
Al siguiente año, en noviembre del 2004 se inauguró el Centro de Alto Rendimiento de Baja California (CAR), un sueño que se hizo realidad en poco más de 18 hectáreas sobre los terrenos universitarios de la Mesa de Otay junto al Aeropuerto Internacional.
El CAR fue formalmente inaugurado un 26 de noviembre de 2004, a la mente me regresaron varios años de historia que me han tocado atestiguar en materia deportiva desde que llegué a esta región procedente de Michoacán en 1991, en esa época nadie hubiera imaginado con un espacio como este.
Clave en proyección, construcción y operación del CAR ha sido el maestro en ciencias del deporte, Saúl Castro Verdugo, Baja California tiene dos épocas, el antes y el después de este deportista, profesional y especialista en el área que ha logrado el apoyo de tres gobernadores para alcanzar varias de sus metas.
Como director de Instituto del Deporte y la Cultura Física ha tenido el respaldo de los ex gobernadores Eugenio Elorduy, José Guadalupe Osuna Millán y actualmente del ejecutivo estatal, Francisco Vega de Lamadrid.
Antes de Castro Verdugo el deporte de Baja California ha estado en las manos de Amparo Aidé Pelayo, ahora Subsecretaria de Educación, Enrique Siqueiros Lozoya y Adrián Carrascosa Verdugo, cuatro años con el primer gobernador emanado del PAN, Ernesto Ruffo.
Quien esto escribe se inició en 1991 en el periodismo deportivo la generación de cronistas se dividía en dos grupos,los que vieron nacer los medios en Tijuana, Juan Manuel Martínez, Marcelo Martínez, Ramón Cano, Raúl Topete, José, Nicarlo, Nicolás Cervantes, Ricardo Rosas Reyero, Manuel Sierra, René Gómez, José Luis Valadez, Mario Thomas, Gustavo López Moreno y Guillermo Lizárraga, entre otros, algunos ya se nos adelantaron.
El otro grupo, jóvenes en esas fechas, los formaban Jorge Villanueva, Carlos Yeme, Jesús Witney, Guillermo Brito, Pascual Campomanes, René Mora, Homobono Briceño, Ana Gabriela Colina, Carlos Barboza, Dorina Sánchez, Alicia Rosas, Luis Alonso Carazo Macareno, René Sánchez, Alberto Rico, Angel González, Carlos Melo, Octavio Favela, Zorina Flores, Saida Muriel, Jesús Topete, Juan Angel Avila, después llegaron otros más jóvenes como Dante Lazcano, Rafael Gonzalez, Manuel Zepeda, Arturo Coughu, Teodoro Guerrero, Isarel Gasca, Edgar Acevedo, Cristian Espinoza, el profe Rodolfo Hernández, entre otros.
La ida al CAR me despertó una inquietud, impulsar una serie de pláticas para hablar de la historia del deporte en Tijuana y de la historia del periodismo en esta frontera, personajes como Juan Manuel Martínez, José Saldaña, Marcelo Martínez, René Gómez Noriega, seguramente tendrán mucho que compartir.
La trasformación en el desarrollo del deporte en Baja California es evidente y el periodismo deportivo ha tenido grandes plumas que han plasmado infinidad de historias, otros más jóvenes se han sumado a esta actividad y me parece que es necesario editar alguna publicación sobre estos tópicos.
Por hoy aquí le paramos, la ideas es estrechar mas el turismo, el turismo cultural y el turismo deportivo